En las relaciones amorosas siempre hay uno que ama más que el otro. Siempre hay un tonto que se pierde en la ilusión del amor esperando lo mejor. Si las cosas no fueran así, las relaciones durarian para siempre. No habría uno que busca el amor fuera de la relación, uno que esta cegado de amor ante las mentiras y los engaños, uno que siempre esta buscando al otro, y uno que siempre esta buscando como no estar ahi.
Esto lo tengo muy claro, pero si me preguntas el por qué, no sabría que decirte. Será que a final de cuentas lo que más nos gusta es el dolor, por que mientras más dolor sentimos, cuando finalmente nos llega la felicidad nos sabe mejor. Por que es eso que hemos estado anhelando...
Pero esto nos deja una incognita, entonces por que solo somos unos lo que amamos demasiado? Por qué no le pasa a todo el mundo? Será que hay personas que han encontrado la felicidad sin tener que vivir el dolor? Quizás encuentran su felicidad en nuestro dolor.
En verdad que estamos locos, los que aman demasiado perdonan mucho y los que no, cometen demasiados errores. A final de cuentas aquel que engaña tiene más oportunidad que aquel que amo demasiado. Y que se le puede hacer, así son las cosas.
Pero independientemente de todo lo que acabo de decir, mi consejo es este: Ama como si no hubiera un mañana. Serás el tonto que amó demasiado, pero a final de cuenta eres el que sale ganando. Eres el que se arriesgó y a lo mejor ganes o a lo mejor pierdas, pero lo vivido nadie te lo quita y amar es lo que nos recuerda que estamos vivos.
1 comentario:
La capacidad de amar es lo que no debemos perder nunca. Pienso que las personas que no aman integramente es decir con todo, lo hacen justamente por evitar el dolor. De tal suerte que los que no sienten o evitan sentir el dolor no saben amar, ni entregarse en cuerpo y alma.
Publicar un comentario